ENSEÑAR EN TIEMPOS DEL COVID-19

Por Adriana García Pedro*

Hoy me preguntaron qué era ser una lideresa de capacitación en tiempos del Covid-19, y aquí les cuento mi historia…

En estos tiempos de confinamiento, las actividades cotidianas han dado un giro de 180 grados Este giro, también ha impactado a mi actividad como líder de capacitación, ya que debo hacer de forma virtual las capacitaciones que antes impartía en forma presencial. Esto ha sido un gran reto en el que he invertido energía, he tenido incertidumbre y he enfrentado diferentes obstáculos. 

Por lo tanto, para mi ser lideresa de capacitación en grupos de mujeres emprendedoras no solo implica compartir conocimiento empresarial, sino que involucra acompañar a dichas mujeres en su desarrollo integral. Generando empatía, sororidad y trabajo colaborativo. Es así que logro fomentar dos pilares principales en su formación, a saber: 

  1. La creación de espacios de aprendizaje empresarial en el que las mujeres logren tejer redes de negocios que les permitan desarrollar nuevas formas de producir y comercializar sus productos o servicios.
  2. Encontrar un espacio y una red de apoyo afectiva que les permita identificarse con otras mujeres y sentirse acompañadas no solo en el camino del emprendimiento. 

En este orden de ideas, mi experiencia como psicóloga me ha llevado a realizar labores de acompañamiento emocional, como la escucha activa, respeto y empatía; y fomentar la comunicación asertiva y la inteligencia emocional. Es así que en los grupos de capacitación encuentran un medio para compartir experiencias de su día a día, no sentirse solas (acompañamiento) ante las experiencias negativas como: violencia doméstica, decesos, tristeza profunda; desolación, depresión, entre otros.

Tal es el caso Lady1 que se encuentra en un grupo de capacitación en la alcaldía Iztapalapa quien vivía inmersa en un ambiente de violencia doméstica en el que no se aceptan las diferencias y se imposibilita la confrontación de ideas y opiniones que permitan llegar a un acuerdo, lo que la llenaba de miedo e inseguridad para seguir avanzando en su negocio y sobre todo para establecer una relación sana con sus hijos e hija. Al llegar el confinamiento esto aumentó, sin embargo en el proceso de capacitación ella ya había desarrollado herramientas de autonomía y diversas ideas innovadoras para su negocio, ¡si! ya no era la misma lo que la llevó a romper la cadena y tomar decisiones que impactan a largo plazo, en estos momentos refiere lo siguiente: 

“Me siento muy confundida pero con mucha fortaleza, me he estado moviendo y no todo está mal, en mi local han aumentado las ventas y he buscado y adaptado nuevas alternativas de venta y se me han dado… No me equivoqué el primer día del curso que sentí caer como pluma con tus palabras” 

Por lo tanto, hoy en día, en mi práctica como lideresa de capacitación tengo la responsabilidad de brindar un proceso integral que lleve a las mujeres a un conocimiento personal y empresarial; sé que si logran alinear su proyecto de negocio a su proyecto de vida sus logros serán de gran impacto.

 

1- Se ha modificado el nombre para proteger la identidad de la persona.

*Licenciada en Psicología egresada de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de la UNAM, cuenta con especialidad en Psicología educativa con sub especialidad en Calidad docente por la misma institución, así como estudios de género en distintas instituciones privadas. desde hace dos años es Líder de capacitación y desarrollo de estrategias en CREA Comunidades de Emprendedores Sociales A.C. e implementa el Programa Avancemos por la Igualdad, una alianza de Bonafont y ONU Mujeres.

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